El premio Nobel de literatura, así como los Oscar, tiene su contracara en lo bizarro, y el premio a la peor película o al peor actor tiene su correlato en las letras. Argentina es una potencia editorial en ambos extremos, y así fue que disputamos los lugares más destacados a la
Pelotudez Escrita Más Berreta y mal no nos fue: Belen Francese, el Bambino Veira y Jacobo Winograd fueron figuras destacadas que acompañaron al primer premio que se
ganó el Rabino Sergio Bergman a las pelotudez impresa de la última década.
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